Los 10 errores en usabilidad que debes evitar

Si quieres tener una página web con buena usabilidad te presentamos los errores que debes evitar.

La usabilidad es uno de los pilares fundamentales de las páginas web, junto con el diseño, la creatividad y el contenido, por eso es vital tener mucho cuidado, puedes refrescar la memoria con los principios básicos de Jakob Nielsen antes de empezar.

3, 2, 1… ¡empezamos!

1. Errores de coherencia y consistencia en el desarrollo y diseño de la web.

La coherencia es vital, la web debe seguir la misma lógica en todas y cada una de las páginas, es decir, la información debe ser presentada de la misma manera, los botones y enlaces deben ser y funcionar igual, etc.

Foto: Robert Anaschn

La telaraña es una estructura de seda construida a partir de hileras, es más resistente que un cable de acero del mismo grosor, los hilos deben estar bien tensas para que la estructura no se rompa.

2. No tener un diseño responsive.

Actualmente la ausencia de diseño responsive es un error grave y, sin embargo, sigue siendo de los errores más habituales. Lo hemos dicho en otro artículos, los usuarios cada vez utilizan más el móvil, si nuestra página web no está preparada para funcionar, y hacerlo bien, en todas las plataformas perderemos visitas y posibles clientes.

Por si no encuentras motivos suficientes, aquí tienes algunas de las ventajas del diseño responsive:

3. Organización deficiente de la estructura y los contenidos de la web.

Los usuarios deben poder encontrar lo que buscan con facilidad, por lo que la web tiene que estar muy bien estructurada, es decir, debe haber un orden jerárquico con un menú claro e intuitivo. Si el diseño es muy atractivo y original pero nadie lo entiende no nos sirve.

Además, también hemos de organizar el contenido de manera que sea agradable de leer. Debemos tener en cuenta que los usuarios miran de izquierda a derecha, no miran la publicidad la ven y van directamente al contenido y las opciones de la página. Tampoco leen, sino que escanean y son muy impacientes y perezosos, no quieren ni esperar ni buscar.

4. Textos poco legibles.

Como ya hemos dicho en el punto anterior los usuarios no leen, sino que escanean, por lo que los tenemos que dirigir a lo más importante cuando escaneen. Te damos algunas propuestas sobre cómo hacerlo:

Títulos y subtítulos de diferente tamaño o color.
Párrafos separados.
Elementos gráficos (imágenes, tablas, gráficas) que apoyen el contenido.
Índice, si el contenido es muy largo (ejemplo: Wikipedia).
Viñetas o enumeración.
Evitar los textos justificados, ya que no facilita a los usuarios la búsqueda de información y es un problema para las personas disléxicas.
Utilización de la negrita y la cursiva.
Comprobar que el color de la letra y del fondo están en armonía, es decir, que el fondo permita la lectura.
Elegir una buena tipografía. Sobre todo evitar la ComicSans. Descubre las razones para odiar la ComicSans, no lo decimos nosotros.

Foto: Randall Ruiz

Podemos saber la edad de las tortugas contando las líneas de su caparazón. Es una manera fácil y fidedigna de saber cuántos años tienen aproximadamente, con un método claro y visible. ¡No es un texto, pero es legible!

5. Incorrecta gestión y control de enlaces internos.

El botón debe ser el adecuado, al igual que los enlaces internos. Deben ser visibles, espaciados con los otros elementos y que se puedan hacer clic con comodidad, es decir, que no se pueda hacer clic en otro lugar por error para que sea muy pequeño o que no haya suficiente espacio a su alrededor.
El usuario debe poder ver en el texto qué es un enlace y qué no. Ya sea diferenciándolo desde un buen principio o que al pasar por encima este cambie de color.
El texto del enlace, lo que llamamos texto ancla (anchor text) debe dar pistas del contenido que hay en el otro lado, tenemos que huir de CTAS clásicos como: clic aquí o visita el enlace. Recordemos que el usuario no lee, por lo tanto si en su escáner ve el enlace y le pone "pincha aquí" se quedará igual, en cambio si lee “Los 10 principios de usabilidad de Jakob Nielsen”, sabrá que se encontrará.
Los enlaces no pueden estar rotos ni conducir a un lugar o sección equivocada.
Resaltar con otro color los enlaces que ya hemos visitado.

6. Errores de formulario y contacto.

A EVITAR:

La solicitud de datos innecesarios.
No poner ejemplos en los campos requeridos.
No mostrar los posibles errores que comete el usuario durante el registro.
No incluir algún botón de 'empezar', 'cancelar' o 'reiniciar'.
Si hay algún error en el formulario o se ha dejado un campo obligatorio, que el formulario no guarde la información y que el usuario tenga que empezar de nuevo.
No comprobar si el formulario web funciona correctamente cuando el usuario retrocede o avanza en el navegador.
No comprobar diferentes opciones de diseño de formulario web como cambios visuales en los campos del formulario, por ejemplo, en rojo cuando haya un error o cuando se olvide un campo.
No comprobar si hay etiquetas de formularios que no están bien correlacionados con los campos de los formularios de entrada, por ejemplo, poner los ejemplos en otro idioma.

7. Falta de mecanismos de búsqueda interna o ineficiencia de los existentes.

Una web con bastante contenido es necesario que tenga un buscador interno. Este debe ir optimizando a medida que los usuarios lo vayan utilizando. La web puede ofrecer ejemplos escritos en el campo que se debe llenar en la caja de búsqueda, que el buscador ofrezca alternativas si no encuentra lo que el usuario busca.

Foto: Unsplash

Depende de la clase de árboles que vivan en un bosque podemos saber qué tipo de seta crecerá. Por lo tanto, los árboles son un buen indicador de si a sus pies se esconden setas, siempre que sea otoño, claro.

8. Nombres de página y favicon.

La nomenclatura de las páginas debe ser lógica y que nos de un avance de lo que nos vamos a encontrar. Por ejemplo, es mejor una URL que sea:

https://www.intuix.cat/ca/blog/millorar-resultats-mapes-calor-web

que no una de este tipo:

https://www.intuix.cat/ca/3850?=xw

Por otra parte, es imprescindible tener un favicon (icono que se asocia a la página web). Sirve para identificar la página web de un solo vistazo en las pestañas abiertas, el historial de páginas visitadas, etc.

9. Saltarse los estándares.

Hemos creado una serie de normas o de convenciones que todo el mundo sigue, salir de aquí es exponerse a que no te entiendan y se marchen. Unos ejemplos de estos estándares son:

La información más importante va a arriba a la izquierda, para que los usuarios miran de izquierda a derecha y de arriba a abajo.
Las palabras subrayadas o de otro color significa que son un enlace.
Para eliminar un elemento el símbolo será una X o una papelera.
El botón que indica que es un menú tiene forma de hamburguesa.

10. No tener mecanismos de feedback.

Es importantísimo que los usuarios sepan y que vean que detrás de la web hay personas. Por lo tanto se lo tenemos que poner fácil y accesible el hecho de hablar con nosotros.

+1. ¡EXTRA!

Los usuarios esperan que el logotipo, situado en la parte izquierda superior de la página web, los devuelva al inicio. Es un pequeño detalle, pero que puede facilitarles la navegación.

Ahora sí, tenemos las velas izadas y el barco a punto, ¡a navegar!

¡Todo resumido y en un único sitio!:

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